jueves, 2 de agosto de 2007

Arquitectos más concienciados


Fuente: Terra


Los futuros arquitectos afrontan en primera persona lo que significa ser una persona con discapacidad gracias a una asignatura pionera en España, que les obliga a usar bastones de ciego, sillas de ruedas, antifaces y tapones en los oídos para ponerse en su lugar.


La Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universitat Internacional de Catalunya (UIC) imparte la materia 'Accesibilidad y proyectos', que tiene por objeto acercar los problemas de las personas con discapacidad a los profesionales del diseño y la construcción de un edificio.


La asignatura, dirigida por el profesor Ignasi Pérez Arnal y coordinada por el arquitecto Enrique Rovira- Beleta Cuyás, incluye clases teóricas con profesores especialistas y ponencias de diferentes arquitectos, técnicos y usuarios con discapacidad.
Además, abarca distintos ejercicios y visitas a diferentes entornos para observar las propuestas que ayuden a solventar el problema de la accesibilidad.
Según el último informe del Instituto Nacional Estadística, el 9% de la población española, algo más de tres millones y medio de personas, tiene alguna discapacidad.


Esta iniciativa conjunta de la Fundación Adecco y la UIC, puesta en marcha hace sólo cuatro meses, trata de responder a uno de los principales retos de la sociedad española: la eliminación de los numerosos obstáculos y barreras que aún existen.


Según el profesor Rovira-Beleta, 'una vivienda debería ser accesible y poderse utilizar toda la vida, incluyendo aquellas fases en las que el grado de dependencia de sus habitantes va aumentando, sobre todo con la edad'.


'Pretendemos que el alumno descubra las capacidades de las personas con discapacidad y que entienda que la accesibilidad no es solamente una necesidad para las personas con discapacidades, sino una ventaja para todos los ciudadanos', añadió.


La asignatura, que según sus promotores es 'pionera en España', analiza la normativa vigente y las nuevas tendencias, el diseño del espacio urbano, la accesibilidad en el transporte y las comunicaciones.
El ciclo formativo, de cincuenta horas lectivas repartidas en clases teóricas, talleres y visitas, hace hincapié en los espacios privados. El proyecto final de curso consiste en hacer un estudio de adaptación a una vivienda o a un centro de trabajo.

No hay comentarios: